El Ministerio de Cultura del Perú se niega a homenajear a Nicolás Yerovi: «Lo queremos elevar al nivel de los grandes olvidados»

Nicolás Yerovi en el Parnaso
Lima, Perú. En un giro inesperado y absolutamente coherente con la tradición burocrática nacional, el Ministerio de Cultura, liderado por el ministro Fabricio Valencia Jipaja, ha decidido no rendir homenaje a Nicolás Yerovi. ¿La razón? Según Valencia, el objetivo es «preservar su legado elevándolo al Olimpo de los grandes escritores que el Perú ha decidido ignorar».
«Queremos que Nicolás Yerovi sea recordado como un verdadero grande, al nivel de figuras como Oscar Wilde, Molière o incluso Roque Dalton», explicó el ministro durante una conferencia de prensa en la que, por cierto, casi nadie estaba presente porque nadie se enteró. «Miren, el Perú no es un país que rinde homenajes por cumplir; somos un país de trascendencia, y nada trasciende más que el olvido bien organizado».

Dando la bienvenida a Nicolas Yerovi al Parnaso tenemos a oscar wilder Mark Twain, Moliere, Aleksandr Solzhenitsyn, Bertolt Brecht,Ambrose, Roque Dalton y Bierce, tampoco me pidan les diga en que orden esta ¡por favor, ya sería el colmo!
La estrategia del ministro: un repaso por los grandes olvidados
Valencia, en un alarde de erudición (que después veremos, no era tal), enumeró las figuras históricas que han sido ignoradas, repudiadas o enterradas sin pompas en su momento:
- Oscar Wilde: «Un genio que criticaba la hipocresía inglesa. ¿Qué hicieron los ingleses? Lo metieron preso y lo dejaron morir en el exilio. Lo mismo hacemos aquí, pero con menos presupuesto. ¡Es nuestro modelo a seguir!»
- Molière: «¡Un grande de la comedia francesa que tuvo que ser enterrado a escondidas porque la Iglesia lo consideraba un pecador! ¿Se imaginan? Nosotros queremos que Nicolás tenga esa misma gloria póstuma. ¡Qué honor!»
- Bertolt Brecht: «Un maestro del teatro épico, ignorado por su propio régimen comunista. Si el comunismo puede ignorar a un genio, ¿por qué nosotros no? Es un arte, créanme».
- Roque Dalton: «Asesinado por sus propios compañeros. ¡Eso sí que es ser controversial! Quizá no podamos matarlo, porque sería demasiado trabajo revivirlo, pero ignorarlo es lo menos que podemos hacer».
- Mark Twain y Ambrose Bierce: «Ellos criticaron a la sociedad estadounidense con sátiras brillantes, y aunque no les negaron entierros, nunca les dieron los homenajes que merecían en vida. Nicolás merece ese mismo trato ejemplar».
Al final de su lista, Valencia exclamó: «Si todos estos grandes pueden ser olvidados, ¿por qué no Yerovi? No podemos rendirle un homenaje cualquiera; sería ofensivo para su genio».

Grandes escritores olvidados los favoritos del ministro
La revelación final: el ministro y su currículum lector
Sin embargo, una filtración inesperada llegó al final de la conferencia, cuando el periodisto Beto Ortíz preguntó al ministro cuál era su obra favorita de Nicolás Yerovi. Tras un incómodo silencio, Valencia admitió: «No he leído nada de él. Bueno, ni de él, ni de nadie. Ni siquiera el Coquito, pero escúchenme, soy un apasionado de la cultura, aunque no la practique».
Valencia cerró con una frase que dejó claro el espíritu de la gestión cultural en el Perú: «Que me disculpen, pero el Perú es un país de colmos. Y hoy, queridos compatriotas, acabamos de añadir uno más a la lista».
Entre risas nerviosas y murmullos de incredulidad, el público abandonó la sala, mientras el ministro parecía muy satisfecho consigo mismo. ¿Será este otro capítulo para los anales del humor involuntario peruano? Sin duda, Nicolás Yerovi estaría orgulloso. O furioso. O las dos cosas.
Nota del redactor: Acordes con el espíritu del mensaje del ministro esta nota saldrá publicada en la sección Deportes

